Gobernanza & Empresas Familiares

Anticipando el Conflicto en la Empresas Familiares

Por Kryssia Madrigal

La familia ha sido y continúa siendo una de las estructuras fundamentales de la producción económica.  A partir de esta estructura se han desarrollado una gran cantidad negocios, algunos de los cuales han llegado a convertirse en importantes empresas y corporaciones de renombre a nivel mundial incluso en nuestros tiempos.

Además de afrontar los cambios del entorno mundial a nivel filosófico, social, económico y tecnológico, las empresas familiares tienen el reto de sobrevivir en el largo plazo y vencer otros problemas adicionales tales como superar la transición entre generaciones, conflictos que surgen en la relación familia-empresa y la falta de confianza. 

Estos conflictos muy naturales desde el punto de vista de las relaciones humanas pueden llegar a incrementar los problemas de rivalidad y competencia generacional dentro de una empresa familiar que, de no existir una clara anticipación a los mismos, pueden llegar incluso a obstaculizar su desarrollo e incluso generar su extinción o división.  Por estas razones se hace necesario el desarrollo de acuerdos en la relación de la familia para con el negocio y mantener la armonía en la familia.

El dilema de la empresa familiar

Como se ha mencionado, en una empresa familiar se debe lidiar no solo con los problemas propios que un negocio conlleva, sino con las necesidades, preocupaciones y deseos de una familia.  Un negocio familiar involucra emociones y sentimientos, por lo que se requiere un balance que no es fácil de manejar.

Uno de los principales retos en la mayoría de los negocios familiares es encontrar un verdadero balance familia-negocio, desgraciadamente en la mayoría de los casos esto no se cumple y generalmente existe un sesgo hacia uno de los extremos, primero la familia o primero el negocio.  Un sistema con sesgo hacia la familia antepone las necesidades, preocupaciones y estabilidad familiar antes que la planificación en el negocio, por lo que se afectan los canales de comunicación gerencial, la medición del desempeño, la toma de decisiones y el aprovechamiento de las oportunidades estratégicas del negocio.  Un sistema con sesgo hacia el negocio descuida los temas y necesidades de la familia y se afectan la comunicación familiar, la identidad, la lealtad, el tiempo con la familia y las emociones.  Ambos extremos no son deseables, para asegurar la supervivencia de largo plazo de un negocio familiar se debe encontrar un

balance adecuado entre la familia y el negocio, de manera que se logre un buen desempeño en el negocio, con confianza, compromiso y armonía familiar.

La importancia del Protocolo Familiar

La continuidad del negocio familiar no solo depende de su éxito en el medio en que se desempeña, sino de la transparencia y la planificación de las reglas de la familia con respecto al mismo.  El establecimiento de dichas reglas pretende apoyar el desarrollo de acuerdos familiares para aclarar las expectativas de la familia alrededor de temas difíciles como dinero, carreras, control y sucesión, entre otras, anticipando de esta forma muchos de los conflictos más comunes en la empresa familiar.

En el plan de continuidad familiar se asume que la familia juega un papel importante en el éxito del negocio y, por lo tanto, se debe enfocar a la familia en crear nuevas estrategias para revitalizar la empresa y promover el crecimiento futuro a través del tiempo y las siguientes generaciones.

El proceso para definir el Protocolo Familiar es complejo, y en la práctica requiere de un proceso iterativo, para alcanzar acuerdos finales.  Para realizarlo es necesario contar con el compromiso de todos los miembros de la familia que participan en el proceso, y la disciplina de reuniones de trabajo donde se definan y discutan las diferentes reglas a establecer en torno a la empresa familiar.  Además, es fundamental definir si la familia está dispuesta a trabajar junta para perpetuar la empresa familiar, aceptando las responsabilidades que esto implica y si además, desean continuar trabajando junta para hacer crecer su patrimonio más allá de la empresa actual.

Por esta razón, cada proceso es único y diferente, dependerá de las necesidades y expectativas de cada familia.  Al final del día se espera obtener un documento que represente su “constitución familiar”, con la cual todas las partes estén de acuerdo y comprometidos a cumplirla.  Nuestra experiencia con más de 150 familias asesoradas en América Latina nos ayuda a brindar soluciones para anticipar los conflictos que suelen formar parte de una empresa familiar.

Esteban R Brenes y Krysia Madrigal, basado en el artículo El reto de los negocios familiares, publicado en: REVISTA INCAE Vol XIII. No.3, Octubre 2003